Se ha probado con éxito en 36 voluntarios
La vacuna Mtbvac contra la tuberculosis ha mostrado una excelente seguridad y perfiles de inmunogenicidad prometedores
La vacuna MTBVAC contra la tuberculosis desarrollada por Carlos Martin, profesor de la Universidad de Zaragoza, en colaboración con Brigitte Gicquel del Instituto Pasteur, ha mostrado una excelente seguridad y perfiles de inmunogenicidad prometedores en su primera evaluación en 36 voluntarios. El estudio, realizado en el Centro Hospitalario Universitario de Vaud (CHUV) en Lausana (Suiza), se ha publicado en la revista “The Lancet Respiratory Medicine”.
En esta primera evaluación se ha probado con éxito la vacuna en 36 voluntarios con signos de exposición previa a M.tuberculosis. Tras esta prometedora evaluación, los investigadores evaluarán la seguridad y la inmunogenicidad en los seres humanos en un entorno endémica en un estudio que ha comenzado recientemente en Sudáfrica. Según explican los investigadores, «MTBVAC se considera que es la vacuna candidata más prometedora en la cartera de vacunas en proyecto global».
Esta vacuna podría llegar a sustituir a la del bacilo de Calmette-Guérin (BCG), la única disponible a nivel mundial, pero que solo protege a niños y no previene a adultos y niños de la tuberculosis pulmonar, la forma más común y más contagiosa de la tuberculosis.
En el estudio de fase I, patrocinado por la Compañía Española de Biofarmacia Biofabri y llevado a cabo en colaboración con la Tuberculosis Vaccine Initiative (TBVI), se comparó con BCG, y no mostró ningún signo de la enfermedad y sólo efectos secundarios leves en 36 voluntarios.
La respuesta inmune de los sujetos vacunados con MTBVAC mostró resultados prometedores y una fuerte memoria inmunológica a los 210 días tras la vacunación. «En mi experiencia, es una de las vacunas más seguras que he probado», dice el profesor François Spertini de CHUV, el investigador principal del ensayo.
“Si MTBVAC se ejecuta correctamente en todas las fases de la evaluación clínica y muestra una eficacia potencialmente más fuerte, podría sustituir a BCG y proteger a millones de niños y adultos de la tuberculosis», ha explicado Martín. La tuberculosis sigue siendo una de las enfermedades transmisibles más letales del mundo y causa la muerte de 1,5 millones de personas al año, según la Organización Mundial de la Salud.